Estaba regresando de un sitio y me dio bastante pena pensar que, probablemente, a menos que esten vacías, en cada casa por la que pasaba había una plaga de problemas y vidas con historiales manchados y traumas irreversibles.
Estar mal no es una broma. Competir para ver quien está peor es egoísta.
No me merezco lo que tengo, tengo demasiada suerte y no he hecho nada.
Hay días en los que no tengo ganas de levantarme, moverme.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario